Los implantes dentales son raíces dentales artificiales que se colocan quirúrgicamente en el hueso maxilar para sostener dientes de sustitución o prótesis dentales, como coronas, puentes o dentaduras postizas. Están diseñados para imitar la función y el aspecto de los dientes naturales y proporcionar una base estable para las restauraciones dentales.

A continuación te explicamos cómo funcionan los implantes dentales y por qué se utilizan habitualmente en odontología:

1. Estructura del implante: Los implantes dentales suelen constar de tres componentes principales:

   • Fijación del implante: Se trata de un pequeño poste de titanio que se implanta quirúrgicamente en el hueso maxilar. El titanio se utiliza porque es biocompatible y capaz de fusionarse con el tejido óseo circundante en un proceso denominado osteointegración.
   • Pilar: El pilar es una pieza conectora que se une al implante y sobresale por encima de la encía. Sirve de anclaje para la restauración dental.
   • Restauración dental: La restauración dental, como una corona, un puente o una dentadura, se fija de forma segura al pilar. Está hecha a medida para que coincida con el color, la forma y el tamaño de los dientes naturales del paciente, proporcionando un reemplazo de aspecto natural y funcional.

2. Procedimiento quirúrgico: La colocación de implantes dentales se realiza normalmente en varias etapas. Durante la cirugía inicial, el implante se coloca quirúrgicamente en el hueso maxilar. A continuación se sutura el tejido gingival y se deja que el implante cicatrice y se integre en el hueso durante varios meses. Una vez completada la osteointegración, el pilar se fija al implante durante una segunda intervención quirúrgica. Por último, se coloca la restauración dental sobre el pilar para completar la restauración del implante.

3. Ventajas: Los implantes dentales ofrecen varias ventajas frente a las opciones tradicionales de sustitución dental, como las prótesis removibles o los puentes dentales:

   • Estabilidad y durabilidad: Los implantes dentales proporcionan una base estable y duradera para los dientes de sustitución, permitiendo a los pacientes masticar, hablar y sonreír con confianza.
   • Preservación de la salud ósea: Los implantes ayudan a preservar la densidad del hueso maxilar y previenen la pérdida ósea estimulando el crecimiento del hueso y manteniendo la estructura ósea.
   • Aspecto natural: Los implantes están diseñados para parecerse mucho a los dientes naturales tanto en apariencia como en función, proporcionando una sonrisa perfecta y realista.
   • Longevidad: Con el cuidado y mantenimiento adecuados, los implantes dentales pueden durar toda la vida, lo que los convierte en una solución a largo plazo para la sustitución de dientes.

4. Indicaciones: Los implantes dentales pueden ser recomendados para pacientes que tienen uno o más dientes perdidos, suficiente densidad ósea para soportar el implante, y una buena salud oral en general. Pueden utilizarse para sustituir un solo diente, varios o incluso una arcada completa.